La mayoría del oficialismo en la Comisión Especial Ocasional que tramitará el proyecto de enmiendas constitucionales en la Asamblea Nacional prepara un año de recorridos por el país para “socializar” con los ciudadanos las propuestas y recibir en comisiones generales a quienes están a favor y en contra de cada enmienda.
Si bien se dará paso al debate y en este a los argumentos a favor y en contra, el asambleísta Virgilio Hernández (AP) reconoce que lo que se puede desarrollar respecto de lo que dictó la Corte Constitucional es “bastante limitado” y Juan Carlos Cassinelli (AP), integrante de la Comisión, coincide en que la Función Legislativa puede hacer cambios de forma y todo cambio bajo el control constitucional respectivo.
“La Asamblea no puede ampliarles los textos, no puede introducir nuevos textos, no puede hacer analogías extensivas, pero redactar mejor, establecer un redacción que no esté en contra del fondo de lo que determinó la Corte es posible”, manifiesta Hernández.
En tanto, para el asambleísta Ramiro Aguilar (ex-SUMA, y ahora adherente de Concertación) la Comisión es una especie de conjunto de cámara porque la partitura estaría escrita, no hay cómo cambiar absolutamente nada, o se aprueba o se rechaza.
Al respecto, Luis Fernando Torres (PSC-Cambio), quien fue designado como integrante de la mesa que tratará las enmiendas, sostiene que el debate en la Asamblea será estéril, no va a servir para modificar los textos. “El debate solamente va a servir para que los asambleístas de AP sustenten el texto y que los de oposición critiquemos el texto”, agrega.
“La Comisión lo que podría es retirar ciertas enmiendas, pero no puede añadir”, comenta Aguilar. En ese criterio coincide Hernández, diciendo que la Asamblea no tiene que aprobar necesariamente todos los temas. “Podría no toparse alguna enmienda, por su puesto”.
El pleno deberá ratificar en las próximas horas la creación e integración de la Comisión Especializada.
Fuente: El Universo
