El tránsito adquiere una importancia cada vez más creciente en el día a día de los pueblos, de allí que Girón está involucrado en este tema de prioritaria atención. A propósito, esta cabecera cantonal es el paso obligado desde Cuenca y el norte del país hacia otras parroquias, cantones, provincias como El Oro y el país de Perú, en este contexto, debemos lamentar que la Avenida “Girón-Pasaje” se haya convertido en un verdadero “cuello de botella” debido a la aglomeración vehicular. El problema se genera cuando el semáforo ubicado en la intersección de las avenidas “Girón- Pasaje” y la “Municipal”, no facilita el tráfico, antes, por el contrario, genera caos por una interminable cola de vehículos debido a que este aparato da los mismos tiempos para la circulación interprovincial y la que procede de San Fernando y otras parcialidades. Grave congestionamiento a diario y más los fines de semana por la falta de previsión y estudio técnico, comprometiendo a revisar lo más pronto posible los tiempos de intercambio de las señales del semáforo, caso contrario, el caos seguirá incrementándose, sumándose a otro, no menor, generador de caos que provoca el primer semáforo de la avenida, que da inexplicablemente los mismos tiempos para la circulación de la avenida Girón- Pasaje y la salida de pocos vehículos de Girón.
A lo comentado, en la citada avenida se da un comportamiento pueblerino que incrementa el caos, cuando con relativa frecuencia se estacionan vehículos de transporte interprovincial para dejar o recoger pasajeros, en medio de la vía, en cualquier momento y en cualquier sitio.
El tránsito debe ser organizado en la avenida Girón- Pasaje, evitando el que sea “tierra de nadie”, esperando que no se genere aún más el desorden con la creación de un “mercadillo”, se dice de artesanía y afines, adjunto a la vía interprovincial, misma que debe estar expedita para la circulación y no interferida por el estacionamiento de unidades de trasporte en función de un conglomerado comercial, casi en las aceras de la vía interprovincial.
