Ejercer nuestro derecho: Votar
El próximo domingo 5 de febrero tenemos la obligación ciudadana de votar para elegir 3 rumbos, sin embargo y con el propósito de ser corto y coherente en este comentario nos referiremos específicamente a las elecciones para gobiernos seccionales.
En este contexto, creemos que debemos votar conscientemente, en contraposición de algunas personas que se acercan a las urnas solo con la intención de obtener una simple papeleta que podría servirle para algún trámite. Ciudadanos: es la oportunidad para revisar planes y programas, de valorar experiencias y conocimientos, y sobremanera no dejarnos impresionar por ofrecimientos mentirosos e incumplibles, por regalos de gorras o camisetas, y sobre todo, no dejarnos sorprender por el que: “voten por mí”, “yo sé cómo hacer”, “ya lo hice” y más elocuentes palabras que emiten candidatos por convencer en función de ganar votos.
Depositemos el voto como un deber cívico, apoyando a candidatos que posiblemente van a cumplir sus ofertas; que no se suceda como en la mayoría de veces que luego de ganar las elecciones se transforman en sordos, ciegos y mudos para los ciudadanos que apoyaron en la campaña.
Demos el voto confiando en que después no nos defraudarán con los consabidos cuentos de que: no conocían el presupuesto, que son inexpertos, que la culpa es de las anteriores autoridades, que no tenemos personal idóneo en el pueblo por ello que nos llenamos de extraños, que ha sido harto difícil gobernar, y más vericuetos que ojalá no aparezcan en el desempeño de las funciones.
Dicen que cada pueblo se merece su gobierno, por ello ratificamos que es necesario votar por ciudadanos que nos den al menos la esperanza de que van a cumplir honradamente las obligaciones para con el pueblo que los eligió, caso contrario, volveremos con la misma cantaleta: “nos traicionaron”.