Hay un dilema entre cuidar a los hijos en redes sociales y respetar su privacidad. Existen herramientas que permiten tener un equilibrio y evitar casos como el de Dana Ramos, de 8 años, quien desapareció en Riobamba tras recibir un mensaje en sus redes.
Dana Ramos tiene 8 años de edad y el 1 de febrero salió de su casa tras recibir un mensaje en sus redes sociales. Desde entonces, su paradero es desconocido. El caso, por el que hay dos personas detenidas, entre ellas el padre de la niña, ha revivido el debate sobre los niños en redes sociales y los peligros que enfrentan.
Según datos del Ministerio de Educación (2020) 13,1 millones de ecuatorianos son activos en las redes sociales. De este grupo, 1,1 millones tienen una edad de entre 13 a 17 años, lo que evidencia que cada vez es más frecuente que un menor de edad tenga o cree una cuenta en una red social.
Mientras que el ‘Estudio de Redes sociales 2023’, que elabora desde hace casi 15 años la asociación IAB Spain, señala como «internautas» al 94% de la población entre 12 y 74 años, también que las mujeres utilizan las redes en un porcentaje ligeramente superior al de los hombres.
Antes esto es importante saber cómo gestionar las redes sociales y las habilidades de los niños.
Según el Ministerio de Educación, la idea no es crear mayor supervisión, vigilancia o prohibición; sino desarrollar junto con los niños y adolescentes las habilidades digitales básicas que les permitan tener herramientas para afrontar y gestionar estos posibles riesgos.
De hecho, parte de los cambios en la malla curricular que entrará en vigencia en 2025 son los conocimientos en ciudadanía digital.
Fuente: La Hora
