Un día por una emergencia manejó el carro su pareja y aduaneros no le creyeron que lo fuera. Lleva cuatro meses sin recuperarlo. Ha gastado 12.000 dólares en trámites.
Hace cuatro años, acogiéndose al programa Bienvenid@casa, del gobierno nacional, retornó a su natal La Unión, de la parroquia Abdón Calderón, cantón Santa Isabel. Ella es Naritza Jubana Chacha Terreros, ella asegura en Estados Unidos pagó 4.000 dólares para el traslado del menaje de su hogar que incluyó su carro, un Mtsubishi Outlander Sport, ES TM, 2.4, 5P, 4×2 Jeep, de placas ABD 1110, y que para retirarlo en Ecuador canceló 5.000 dólares.
Pero su odisea empezó hace cuatro meses cuando a las 05:30, su cónyuge Miguel Enrique Guerrero Figueroa con cédula de identidad 010248188-4, con quien mantiene una unión de hecho desde hace más de dos años, debido a que se dañó su carro, optó por utilizar el de ella para ir a Cuenca en busca de la medicina Ventolín que necesitaba su hijo de cinco años, quien sufre de problemas respiratorios; pero fue interceptado en Girón por agentes de Aduanas quienes le retuvieron la unidad de transporte.
(Él) “Me llamó y me dijo que le quitaron el vehículo, yo hablé con los agentes y les expliqué de la situación, pero no escucharon nada y desde entonces es un sufrimiento, ya no se qué hacer, todos los papeles que me han pedido he presentado, a pesar de los testigos y de la declaración juramentada que presenté, hubo momentos en que dudaron de que Enrique sea mi pareja”, dijo.
La mujer dice sentirse decepcionada por el trato que ha recibido, asegura que le dijeron que en tres días estará emitida la resolución, pero luego de 20 días finalmente la respuesta fue que se han cambiado los jueces y que debía enfrentar un juicio. Cómo pueden suceder cosas así, se pregunta.
“Toda mi juventud la dejé allá; yo adoro Estados Unidos porque todo lo que tengo hice allá, mejor aquí, en mi propio país me siento perseguida. Se llevaron mi carro, voy gastando como 8.000 dólares en abogados y entregué 4.200 dólares de garantía en Aduanas para poder enfrentar el juicio ya que me manifestaron que sino me defiendo me iban a aplicar al final una multa de 180.000 dólares y que de no pagar me embargarían mis bienes, estoy desesperada, no sé a donde recurrir”, expresó con desesperación.
Trabajo
La mujer tiene 41 años, 20 de ellos vivió en Estados Unidos, en la ciudad de Newark, en el estado de New Jersey, donde instaló su gabinete de belleza y trabajaba con cinco personas más.
Su deseo de estar cerca de su madre y más familiares y segura de contar con recursos para invertir y tener su propia fuente de trabajo, decidió acogerse al programa estatal.
Ella se crió en un restaurante pues su madre le enseñó el arte culinario en su negocio de comida que tiene más de 60 años de historia. En La Unión, junto a la vía Cuenca-Girón-Pasaje, instaló su negocio, la cafetería restaurant El Turismo, en él da trabajo a ocho personas más.
Su vehículos le servía para trabajar atendiendo a sus clientes en la entrega de viandas, pues tiene entre sus clientes a ingenieros y arquitectos que requieren el almuerzo para sus obreros, en obras que se ejecutan en varias comunidades aledañas.
“No sé por qué me hacen tanto problema, nunca he vendido mi carro, eso está prohibido al menos por un lapso de cinco años según las reglas del programa. Quien conducía el momento de la retención es mi pareja. Lo he demostrado”, concluyó.(AZD)-(I)
Antecedentes
La emergencia empezó con los problemas respiratorios del último de sus cuatro hijos, quien tiene cinco años, fue atendido en la noche anterior a la retención del automotor por el médico Diego Panamá, en Santa Isabel, según certificado adjuntado al expediente.
Naritza Chacha es madre de cuatro hijos, el mayor de 18 años y el menor de cinco, sólo el último vino con ella, los tres se quedaron en Estados Unidos y vendrán a visitarla a fines de este mes, su anhelo es recuperar el vehículo para poder pasear con ellos.
El carro en Estados Unidos le costó 19.800, ahora con el problema que atraviesa el valor se ha incrementado considerablemente.
“Siento tristeza al ver a nuestro país con mucha inseguridad para invertir; nosotros que trabajamos tanto fuera y venimos a dar trabajo a otras personas nos tratan de esta manera. Yo trabajo de 07:00 a 22:00 de lunes a domingo, yo espero terminar pronto esta pesadilla”, puntualizó, mientras se dirigía a tomar la orden de un cliente.
Fuente: El Mercurio
Sigue conflicto por vehículo de migrante
La SENAE, defiende su accionar, se insiste que el conductor y la propietaria no son pareja como aseguran.
Miguel Enrique Guerrero Figueroa, quien conducía el vehículo que fue traído libre de impuestos como parte del menaje de casa por la migrante Naritza Chacha al retornar a su natal Santa Isabel desde los Estados Unidos, auto que fue detenido por en Girón durante un operativo del Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (SENAE), ratificó lo señalado por ella, sobre los que se les dijo en Aduanas que al no cancelar una multa de unos 42.000 dólares por supuestas incorrecciones en el ingreso del vehículo al país, el caso pasó a juicio y que si no se defienden, pesaría sobre ellos una sanción económica de 180.000 dólares.
Pero el director regional de la SENAE, Christian Ayora, aseguró que no es así y que la pareja está equivocada, que la multa es solamente la cantidad mencionada al inicio, es decir 1.770 dólares en el caso de la multa contra Miguel Enrique Guerrero Figueroa, por supuestamente cometer una contravención por mal uso de exenciones y suspensiones tributarias aduaneras, ya que las pruebas presentadas a decir de la autoridad aduanera, no convencen de que se trata del conviviente de Naritza Chacha, sino de una persona ajena a la familia de migrante.
Multa
A ello se suma la multa aplicada a Naritza Chacha, por 39.857,80 dólares por considerarla infractora, porque pese a las pruebas presentadas por la pareja, se estima que el vehículo no estaba siendo usado por miembro alguno del núcleo familiar, lo cual es considerado con infracción aduanera.
Según Ayora, la declaración juramentada de la pareja integrada por Naritza Chaca y Miguel Enrique Guerrero Figueroa no es válida por cuanto no determina que llevan por lo menos dos años en unión de hecho como lo exigen los requisitos de ley y que además fue suscrita con fecha posterior a la aprehensión del automotor.
Tampoco se da validez a las declaraciones juramentadas de testigos como Carmen Macas, empleada del restaurante El Turismo que posee la migrante en el sector La Unión de Santa Isabel, quien asegura que Chacha y Guerrero son marido y mujer, al igual de otras personas que les conocen.
También se ha desestimado las pruebas como el certificado extendido por el médico Diego Panamá, de Santa Isabel, quien dice que el viernes 27 de febrero de este año, a las 21:00 atendió a un niño, el último de los cuatro hijos de Naritza, quien padece de asma bronquial, por lo que requería inhalaciones con Ventolín al 0.5 % y se requería conseguirlo con urgencia, mismo que no se encontró en la localidad.(AZD)-(I)
Urgencia
A decir de Naritza y Miguel Enrique, fue la urgencia médica por la falta del medicamento para el niño de ella y el daño que tenía en la madrugada del sábado el vehículo de él, lo que le obligó a utilizar el carro traído dentro del menaje con exoneración de impuestos, para salir a Cuenca en busca del producto. Como el personal de Aduanas cumplía con operativos en Girón, aprehendió el vehículo pese a que Naritza vía telefónica les explicó que son pareja y las razones por las que debía ir a la ciudad.
“Yo no sé cómo más puedo explicar que somos esposos en unión libre, el carro, ella no podía darlo a nadie más que a mí que como su pareja. Se demostró a Aduanas con la receta del guagua para la guagua, se mostró el certificado médico, el historial migratorio de mi esposa que no ha salido del país y el historial del vehículo que demuestra que no ha sido vendido y que es nuestro.
“¿Porqué no nos quieren devolver?, ¿acaso un carro en sol y en el llano no pierde su valor, porqué nos hacen gastar tanto en juicios?. Yo sí pido que se revea el caso y no nos quiten solo porque presumen que no somos esposos”, dijo Miguel Enrique.
MÁS DETALLES
– El caso ha pasado al Tribunal de lo Contencioso Tributario y dependerá de los jueces competentes la resolución de este caso que se ha convertido en conflicto para Naritza a su retorno al Ecuador y su pareja.
– Al momento el automóvil con las multas y gastos en la defensa, ha triplicado su valor, según señalan los afectados. Se trata de un vehículo marca Mitsubishi, color blanco, año 2012, placa ABS1110.
Fuente: El Mercurio
