Año viejo es un monigote que representa básicamente el año que termina, elaborado con ropa vieja, cartón, papel o aserrín, para ser quemado a la medianoche del 31 de diciembre. Los muñecos suelen representar de manera caricaturesca los acontecimientos significativos relacionados con la política, la farándula, el deporte y en general personajes famosos populares, notorios en la localidad o región durante del año transcurrido. (Wikipedia)
En Girón cada año se observa como esta tradición va perdiendo espacio y el entusiasmo que caracterizaba en otras épocas, donde era motivo de acercamiento entre familiares, amigos y vecinos para elaborar los “años viejos” y organizar actos sociales y culturales durante todo el día.
En el año que feneció dos barios hicieron presencia con deportes durante el día y la exposición de la noche, el 26 de Marzo e Industrial; pero, a criterio de muchas personas, la mejor representación es la que se observó en la calle Calderón por parte de la familia Maldonado, que en los últimos años han venido manteniendo y mostrando buena organización con los tradicionales “Años viejos”.
Por otros lugares, con poca gente, o solitarios monigotes esperaban su hora final, la cual llegó entre bullicio y llamas para dar paso al 2016 que se vino entre abrazos y buenos deseos, con juegos pirotécnicos que pudieron vistos desde todo el cantón y el casi generalizado “yo no olvido al año viejo, porque me ha dejado cosas muy buenas…”.
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