Doña María Carchi vive en el sector de Zhizhi perteneciente a la comunidad de Guagrin junto a su hija y nieta. En medio de un fascinante paisaje transcurren los días de sus 94 años.
Sus fuerzas han desmejorado, pero no la idea de ser útil y productiva. Su trabajo, ahora, lo toma más suave, actividades agrícolas ya no hace, pero cuida a sus animales menores.
Semanas atrás, aquellos amigos de lo ajeno que no faltan, se llevaron un gallo y tres gallinas, brillan sus ojos de la impotencia e indignada manifiesta que no va a dejar que se lleven sus cosas.
Arrastrándose bajo la cerca de alambres de púas, mientras el sol apenas deja sentir sus primeros rayos de calor, se dirige al espacio donde cría a sus animalitos, con lo cual, ayuda en la economía familiar y a veces, para darse un gusto en casa.
La comunidad está alerta ante estos casos, que vienen a dañar la tranquilidad del sector, por eso siempre están pendientes de quién sube y quién baja por el único camino que conduce al sector, en lo alto de la loma de Topar.
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