Dr. Hugo Lucero L.
Por: Dr. Hugo Lucero L.

Hace pocos días el Consejo Nacional Electoral Transitorio (CNE-T), presidido por el ilustre cuencano Gustavo Vega Delgado, dio paso a la consulta popular que deberá realizarse en Girón, solicitud que estaba durmiéndose en los archivos del citado organismo del Estado y que fue impulsada por comuneros agrupados en los sistemas de agua del cantón Girón y los sectores indígenas y sociales del Azuay, con el respaldo de firmas que terminaron de recogerse en junio de 2015.  La solicitud fue conocida por los anteriores miembros del CNE dependientes del correato que hicieron lo “humanamente posible” para no dar paso. Satisfactoria la aprobación, empero, no elimina la duda de algún ardid de CNE definitivo y mayor duda que la pregunta no pase o sea distorsionada por la Corte Constitucional que está en acefalia, pregunta a saber: ¿Está Usted de acuerdo que se realicen actividades extractivas mineras en el sistema hidrológico de Quimsacocha?   SI o NO.  Dudas justificadas por todo lo acontecido y sobremanera por el interés solapado del Gobierno de continuar con la explotación minera. A esta situación se adiciona el sumario administrativo que el Gobierno pretende seguir al Juez Paul Serrano, por aceptar la acción de protección y ordenar la suspensión de las actividades mineras en Rio Blanco el 1 de junio de 2018, fallo correspondiente a la acción de protección presentada por la Ecuarunari. A estos acontecimientos se van sumando una serie de inconsistencias que se generan en el Gobierno como: el no actuar de manera frontal y con resultados en la lucha contra la corrupción, de seguir manteniendo en su entorno y hasta premiando a ex -funcionarios del correato, y lo más preocupante es la debilidad e indefinición sobre todo en la política económico que deja ver el Gobierno de Moreno. Adicionemos a lo mencionado, la posibilidad de disminuir los subsidios a la gasolina y la no determinación de la consulta popular en Girón serían como: JUGAR CON FUEGO, que al final determinaría que se quemen los responsables directos de los engaños al pueblo ecuatoriano.

No es una amenaza, se trata de una lectura a la realidad y una reflexión ante la posibilidad de “quemarse por jugar con fuego”, al pretender mantener unas políticas contradictorias que pudieran desencadenar un cambio de la pasividad a la acción de un pueblo que ya pasó por experiencias ingratas al llegar a hechos nada aconsejados para la democracia.

Señor Presidente: crememos que acertadamente ha solicitado las renuncias de todos los que conforman el gabinete, para desde este escenario comenzar con la revisión de sus colaboradores, que deben ser, entiéndase sus colaboradores, y no mentirosos colaboradores querendones de un monarca a quien le siguen añorando por haber sido el jefe de las fechorías. Sr. Presidente: con todo el respeto reiteramos: ¡cuidado con quemarse, cuidado con que la consulta de Girón se postergue y más grave aún se traspapele en la potencial Corte Constitucional!

El pueblo sabe pagar como se debe.

Hugo Lucero Luzuriaga

 

 

 

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