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El hospital Vicente Corral Moscoso atendió hasta ayer a seis personas que contrajeron la gripe AH1N1 en Cuenca. A ellos se suma un paciente atendido en Macas por el mismo virus, con lo que llegan a siete los casos confirmados en la región durante las últimas cinco semanas.

Todos los pacientes confirmados con el virus en la ciudad fueron dados de alta y se recuperan satisfactoriamente en sus hogares. Para evitar nuevos contagios, el departamento de Vigilancia Epidemiológica de la Coordinación Zonal de Salud hace un seguimiento a los casos y aplica un cerco epidemiológico.

En el caso de Macas, el paciente fue referido a un hospital de la ciudad de Quito en donde su cuadro clínico evoluciona favorablemente, informó el coordinador de Salud, Oswaldo Suárez.

Una muestra de laboratorio confirmó que las siete personas con gripe AH1N1 contrajeron la cepa denominada 2009. Esta variedad del virus provoca fiebre alta, tos seca, quebrantamiento y, al contrario de la gripe común, no causa demasiado flujo nasal, indicó Suárez.
Prevención
Tanto en el hospital como en los domicilios de los pacientes se tomaron las medidas preventivas necesarias para evitar nuevos contagios, aseguró el Coordinador de Salud.

Sin embargo, el virus se encuentra en el ambiente, por lo que es necesario tomar precauciones como taparse la nariz al momento de estornudar, lavarse las manos de manera constante y no automedicarse, dijo el funcionario.

Suárez pidió a quienes presenten síntomas gripales dirigirse al centro de salud más cercano. “Tenemos médicos capacitados, ellos sabrán guiar correctamente al paciente”, indicó.

 Virus
El médico Mauricio Tobar señala que la cepa 2009 del virus AH1N1 puede ser mortal únicamente si se presenta con un cuadro de “comorbilidad”, es decir en pacientes que tienen enfermedades crónicas como diabetes o cáncer, así como afecciones respiratorias adicionales, entre ellas asma y bronquitis.

Tobar indica que se debe tener especial cuidado en niños y adultos mayores, porque su sistema inmunológico es inmaduro o se encuentra debilitado, lo que incrementa el riesgo de complicaciones.

A más de buscar ayuda médica y cumplir el tratamiento prescrito, quienes sientan síntomas gripales deben consumir abundantes líquidos, mantener una buena nutrición y protegerse del frío, dijo el profesional de la salud. (JPM) (I)

Cuenca.

Fuente: El Tiempo

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