El desfile del 25 de junio de 2019, desarrollado para conmemorar los 195 años de cantonización de Girón, es quizá el que más duración ha tenido en la historia de nuestro cantón.
Fueron cinco horas las que las delegaciones usaron para cumplir el recorrido aproximado de un kilómetro, cerraron el demorado desfile unidades de bomberos y las dos nuevas compañías de taxis. Antes de ellos, representantes de varias comunidades, estudiantes, delegaciones de entidades públicas y privadas, cumplieron también el homenaje a la ciudad que, bajo la organización municipal, inició minutos después de las 10h00.
Muy elegantes, como debe ser, autoridades e invitados abrieron el desfile y se acomodaron en la tribuna, que como de costumbre estaba instalada en el atrio de la iglesia. El sofocante sol durante casi todo el tiempo y el frío al finalizar, no causaron mayor malestar a las autoridades que, bajo cubierta disfrutaron del homenaje preparado y degustaron de manjares regalados por los participantes, otros alimentos eran guardados en uno de los vehículos del GAD Municipal aparcado tras la tribuna.
Largas intervenciones tuvieron algunas representaciones, otras eran cortas, pero en conjunto hicieron que el desfile se extienda hasta la media tarde. Varias personas han manifestado su malestar por esta situación, pues el cansancio y hambre se apoderaban de muchos de ellos, entre ellos existían niños y ancianos.
Se pide al GAD una mejor coordinación y normativa para los desfiles. Hay que mantener un periodo prudencial de tiempo de intervención de las delegaciones y, percatarse que quienes van al último son los más afectados, no están sentados ni atendidos, tienen hambre y sed; algunos aseguraron que están obligados. La fiesta es para rendir homenaje a la ciudad y sus habitantes, pero no hay que abusar de quienes con toda su buena voluntad y civismo están allí.
Eloy Peralta Q.
