El día después de la cuarentena creemos que no está muy lejos, tiempo tan cerca o menos lejano dependiendo de cómo salgamos del reto de asumir el cambio de semáforo. Girón está en semáforo amarillo que representa menos restricciones y más responsabilidades para poder salir lo más pronto de esta crisis sanitaria, social y económica que afecta a toda la población. Caso contrario volveríamos al semáforo rojo y al nuevo confinamiento.
Siendo observadores podemos asegurar que Girón está relajándose en forma preocupante, no estamos respetando las medidas implementadas por el COE Cantonal lo que conllevaría a un inminente peligro de mayores contagios. Comprendemos que el coronavirus está con nosotros y vino para quedarse, entendemos que el ser humano tiene que trabajar para alimentarse, aceptemos que los gobiernos no pueden seguir con su paternalismo y aún más están con las cajas vacías y sobremanera aceptemos que es de nuestra responsabilidad salir adelante como sociedad, siendo corresponsables de las acciones de los gobernantes
No podemos esperar más, estamos al borde de una psicosis colectiva, ante un inminente peligro de sublevación social, por ello, razonemos y actuemos responsablemente ante una crisis mundial retomando nuestras acciones con férrea disciplina, respetando la normativa del COE cantonal en función de ganar espacio a un enemigo invisible que no se va a ir.
A su vez las autoridades están en la obligación de gobernar en distinta forma, de comprender a la diversidad, de administrar en base a acuerdos sociales y económicos en función de motivar a los ciudadanos a vivir una nueva realidad.
Gironenses, podemos salir de este aislamiento y miedo, aceptando y ensayando una nueva forma de vida, acogiendo que estaremos con el uso de la mascarilla, distanciamiento social y aseo adecuado sobre todo de manos por un tiempo indefinido.
Hugo Lucero Luzuriaga
Debe estar conectado para enviar un comentario.