En una entrevista para Radio Morena el lunes 15 de julio de 2024, la vicepresidenta Verónica Abad expuso sus desacuerdos con el presidente Daniel Noboa y abordó las recientes acusaciones en su contra.

Abad manifestó: “Sé de lo que propuse a los ecuatorianos y por eso acordé apoyar esas ideas. Hoy no se han cumplido y este es el tema de que puede unirse al correísmo”. Aclaró que nunca ha compartido los valores del correísmo, pero destacó que esto no implica perseguir y odiar a sus adversarios políticos.

Denuncia de abuso de poder

Durante su intervención, Abad acusó al gobierno actual de abuso de poder: “Es el abuso del poder, el abuso de la estructura pública, el abuso total y claro y abierto a querer destruir las instituciones públicas para adecuarlas a sus intereses personales”. Señaló que estas prácticas son evidentes para los ecuatorianos y negó que sus críticas sean caprichosas.

Cuestión de constitucionalidad

En respuesta a las insinuaciones de que sus acciones son caprichosas, Abad fue clara: “No es mi capricho, nunca he hablado de un capricho. Estoy aquí cumpliendo como tiene que ser mi función y el momento que sea de hacerlo, pues tendrá que pasarlo”. Reiteró que su permanencia en el cargo está dictada por la Constitución y no por deseos personales.

Violencia y persecución política

La vicepresidenta también habló sobre la violencia y persecución política que ha sufrido. “Cuando me destierran y yo comuniqué al pueblo ecuatoriano, claramente no estaba ni estoy ni estaré nunca de acuerdo con esas prácticas”, afirmó. Abad mencionó que las amenazas y hostigamientos que ha recibido son reales y que teme por su vida.

Conflictos internos

Abad reveló que se le ha negado el derecho a tomar vacaciones, a pesar de haber solicitado cinco días de descanso por motivos de salud. “He pedido cinco días de permiso para poder dedicarme a los temas que son muy importantes. Este documento ha dado la vuelta por más de ocho días en varias instituciones, buscando la forma de negarme el descanso”, explicó. Según Abad, esto demuestra que está “secuestrada” en el país y no puede moverse libremente.

Finalmente, la vicepresidenta responsabilizó al presidente y al Ministerio de Gobierno por cualquier daño que pueda sufrir. “Temo por mi vida y mi integridad física. Responsabilizo al Presidente, al Ministerio de Gobierno y a quienes están detrás de nosotros”, concluyó.

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