Las fechas oficiales para la primera y segunda vuelta electoral deben ser aún aprobadas por el órgano electoral.

La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, indicó en entrevistas concedidas a distintos medios de comunicación, la mañana de este jueves, 18 de mayo, que el 20 de agosto es la fecha tentativa para realizar las elecciones generales anticipadas tras la muerte cruzada decretada por el presidente Guillermo Lasso un día antes.

Las fechas oficiales para la primera y segunda vuelta electoral deben ser aún aprobadas por el pleno del CNE, y el calendario definitivo debe ser anunciado máximo hasta el 24 de mayo, según el plazo de siete días que la institución tiene para convocar a las elecciones presidenciales y legislativas.

Atamaint anunció también que para la segunda vuelta no se podrá esperar mucho tiempo y estima que sea a mediados de octubre. Reiteró que los plazos para estos comicios no serán como en un caso normal y, por ello, se utilizará el padrón electoral de las elecciones seccionales. Sin embargo, enfatizó que no se saltará ninguno de los hitos que contempla un proceso electoral y preelectoral.

Se prevé que la campaña electoral solo dure quince días y que el debate se lleve cabo al inicio de ella.

El CNE tiene pendientes también otros procesos electorales que deberán cumplirse y podrían coincidir con este proceso, como la consulta del Chocó Andino, la consulta nacional de Yasuní y las nuevas elecciones de Calacalí.

Una vez que se convoque a elecciones, el CNE se convierte en la máxima autoridad del país. En las recientes reformas al Código de la Democracia se introdujo una disposición general que determina que el “periodo electoral es el ciclo electoral que integra todas las actividades y operaciones que se desarrollan de manera ordenada durante un lapso de tiempo dentro de las etapas preelectoral, electoral y poselectoral”.

A esto se suma que los artículos 16 y 17 de la norma precisan que “ninguna autoridad extraña podrá intervenir directa o indirectamente en el desarrollo de los procesos electorales ni en el funcionamiento de sus órganos electorales”.

Con esto, el CNE y el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) serán las máximas autoridades durante la organización de las elecciones, lo que complica cualquier pronunciamiento que pueda llegar a emitir la Corte Constitucional sobre el decreto de muerte cruzada. 

Fuente: El Universo

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