Peritos en perfilación criminal descifran 4 mensajes ocultos en la carta que recibió Daniel Noboa: ‘Conversar con grupos delictivos sería el peor error que el presidente pudiera cometer’, ‘Cómo pedirle a Satanás que deje de ser el diablo’, advierten
Uno de los tres especialistas consultados por este Diario elaboró el perfil criminal del cabecilla de una organización delictiva y de un expresidente.
Un perfilador criminal se especializa en la conducta de un psicópata y es el profesional que mejor conoce las estrategias para la prevención de un crimen. Ha pasado años estudiando los hábitos de un delincuente, su modus operandi, la sociedad en la que se mueve y hasta los factores biológicos que marcan su comportamiento. Tres peritos en perfilación criminal en Ecuador, que incluyen en su hoja de vida los peritajes que hicieron a la conducta de un expresidente y también a la del líder de una agrupación delictiva, coinciden en que el Gobierno no debe dialogar con organizaciones criminales.
Una de ellas, que se autodenomina Grupo Delictivo Organizado (GDO) Los Lobos, le envió una carta al presidente de la República, Daniel Noboa, en la que le señala su deseo de “iniciar un acercamiento con su gobierno”, colaborar “con la seguridad que el país necesita” y hasta entregar “información relevante que permita desmantelar la delincuencia”.
Con delincuentes no hay que negociar absolutamente nada. Cuando uno cae en el juego de esas negociaciones lo que hace es legitimarlos, Los Lobos no son otra cosa que un grupo de delincuentes que a través del horror mantienen en vilo a la sociedad, si esta sociedad acepta un tratado de paz, lo único que va a hacer es que esta paz nunca va a existir
Alexandra Mantilla, perita en perfilación criminal
Con ella coincide el también perfilador Danilo Ruiz: “No se puede conversar con estas células narcodelictivas porque son un cáncer, no se puede firmar la paz con una enfermedad, o la eliminas, o ella lo mata a usted”. Un tercer perito, que prefirió la reserva de su nombre, agregó que “sentarse a conversar con ellos sería como desconocer sus actuaciones al margen de la ley”.
Los tres expertos descifran la carta enviada por la agrupación criminal y mencionan al menos cuatro mensajes ocultos en su comunicación, entre ellos -por ejemplo- ‘pintar un escenario catastrófico’ cuando mencionan la situación actual, ‘una ola de violencia apocalíptica jamás antes vista en Ecuador’, para más tarde retratarse como los ‘salvadores’ que prometen ‘armonía’ y ‘un nuevo amanecer’.
Utilizan un lenguaje pasivo-agresivo, presentan una catástrofe y luego citan las leyes de la República para decir que es responsabilidad del Estado garantizarles esto y aquello, entonces le dicen al Gobierno ‘yo sé que no tienes recursos, déjame operar a mí, no te cobro nada, pero simplemente no me molestes’“
Danilo Ruiz, criminólogo acreditado por el Consejo de la Judicatura
Un segundo mensaje que detectaron los peritos entre líneas de la carta fue la intención de este grupo delictivo de obtener personería jurídica para legitimar sus actividades. “¿Qué demuestra la estructura de esta carta?, que son personas preparadas, que conocen de leyes y que solicitan una participación activa para, entre comillas, ayudar a recuperar la seguridad”, comentó Ruiz, quien se ha desempeñado como instructor en la escuela de especialización y perfeccionamiento de oficiales de la Policía Nacional.
Otorgarles legalidad sería también un error, dice la experta Mantilla, al analizar el caso de la agrupación Latin King, a la que se le concedió personería jurídica hace más de una década. “Lo que pasó con los Latin King es la confirmación de lo que puede suceder si te sientas a negociar con delincuentes, estos delincuentes pueden llegar hasta funciones públicas. Los Latin King, lejos de desaparecer, existen fuera de las cárceles y dentro de las cárceles, no es que se le hizo un favor a la sociedad sino a ellos como GDO, en la Penitenciaría hay dos pabellones que están con los Latin King”, comenta la especialista.
“Ellos buscan repetir esa historia”, añade Ruiz y cuenta, por ejemplo, que ha recibido denuncias en Santo Domingo, donde organizaciones delictivas presentan oficios a los comerciantes para solicitar como supuesta ‘colaboración’ 500 fundas de caramelos para sus agasajos navideños. “En Quito hay células de los Latin King, se esconden detrás de su personería jurídica para legalmente delinquir, eso se les permitió con la personería jurídica. Los otros grupos quieren llegar a este mismo consenso para delinquir abiertamente, no desde los asesinatos y los secuestros, pero sí desde las extorsiones, desde el tema del lavado mismo. Los Latin King no cambiaron su forma de vida, no, no se convirtieron en un grupo social, siguen siendo GDO, solo que tienen ventaja sobre los otros grupos delictivos porque tienen representante en la Asamblea, tienen fortaleza en grupos y sectores de la política (…). La pregunta es ¿queremos lo mismo para todos los GDO? No”.
La misiva fue escrita por profesionales y contiene un tercer mensaje oculto: ‘Intereses políticos’. “Esta carta tiene un tinte muy político, se nota que quien lo escribió es un abogado, en las bandas hay abogados, no es de sorprenderse; los intereses políticos están ocultos detrás de estas supuestas intenciones de paz. Si realmente buscaran la paz, lo primero que tendrían que hacer sería deshacerse de ese estigma que conlleva que se les identifique con el alias (GDO Lobos). Seamos claros, un GDO es un grupo delictivo organizado, no es un grupo de duendes, no. Partiendo de ahí, ellos no están dispuestos a renunciar, no existe tal intención de la famosa paz. En el momento en que ellos dicen que son GDO no quieren dejar de ser un grupo delictivo y con esos grupos no se debe jamás negociar, y tampoco entrar en conversaciones, sería el peor error que el presidente pudiera cometer y, creo yo, por las declaraciones que ha dado, no lo va a hacer”, analiza Mantilla, quien realizó la perfilación criminal del expresidente Rafael Correa en el caso Sobornos y también hizo el perfil del cabecilla de Los Choneros, Adolfo Macías, alias Fito.
Para hacer este último peritaje, Mantilla pasó días enteros, incluso noches, en algunas cárceles del país. “Desde mi conocimiento, esta carta es una mezcla de un líder que está en la cárcel Regional con varios que están en la Penitenciaría, con uno más que está en el extranjero y con cientos de almas perdidas que han entrado a las cárceles hasta por un accidente de tránsito, pero que le han asignado a un pabellón (dirigido por GDO)”, dijo la experta, al mencionar como cuarto mensaje oculto en la misiva la intención de repartir los territorios a las bandas delictivas, algo que sería un grave error.
“En el supuesto escenario no consentido de que alguien acepte y diga que solo los Lobos existan en las zonas de la Sierra, ¿usted cree que los otros grupos lo van a permitir? No, nunca. Hay grupos que tienen 10.000 personas, Los Choneros para finales de los 90 y entrando al año 2000 ya tenían 15.000 personas. Las masacres se dan por territorio, básicamente, va a pasar lo mismo o peor con la repartición de territorios”, asegura la perfiladora criminal antes de sentenciar: “Voy a ser la más radical de todos: yo, habiendo visto lo que he visto en las cárceles, le puedo decir que sentarse a conversar con ellos es tanto como sentarme a conversar con Satanás a pedirle que deje de ser diablo, algo imposible, y por tanto con ese tipo de personas no se debe negociar, no existe un tal vez, un quizás, no”. (I)
‘Lo único cierto en la carta, la falta de rehabilitación social en cárceles’
Lo único que consideran relevante en la carta de la agrupación delictiva al presidente, a criterio de peritos en perfilación criminal, es la necesidad de programas de rehabilitación social para los internos en las cárceles del país. Según las cifras del Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI), en los centros penitenciarios hay 31.301 privados de libertad.
“Ahí no hay más que una cancha de vóley, sí necesitan programas de rehabilitación, porque tienen demasiado tiempo libre para perfeccionar su modus operandi”, comenta la criminóloga Alexandra Mantilla, quien afirmó que “el sistema de rehabilitación tiene que morir y volver a nacer como debe ser”.
El cambio debe darse de adentro (desde el SNAI) hacia las cárceles. “Tuve la oportunidad de levantar el perfil del señor Fito y en una parte de la carta es como oírle al señor Fito cuando habla de los proyectos sociales. Cuando estuve con él en la cárcel Regional, él me llevó a hacer un recorrido, hace tres años, él hablaba de los proyectos educativos, de criaderos de cerdos, de patos, y en ese momento me dijo ‘acabo de sembrar papaya, pitahaya’. Hay dos párrafos en esa carta que me parece estar escuchándole a él, me dijo que uno de sus grandes sueños era ser director del SNAI, llegó a decirme ‘yo puedo ser su jefe’”, recordó la profesional. (I)
Fuente: El Universo