Así fue el ascenso y ocaso del «Turco» Massuh, otro blanco de Norero
El Ruso y El Turco son dos personajes que concentran gran atención en las conversaciones entre Leandro Norero y Xavier Jordán. Se trata del exlegislador del correísmo Ronny Aleaga (Ruso) y de Naín Massuh (El Turco), un polémico empresario, que ha sabido acomodarse y beneficiarse en diferentes gobiernos, a través de sus poderosas conexiones políticas que también le han sido útiles para acceder a información privilegiada. Luego, con esos datos, levantaba informes de inteligencia, para ofrecerlos a diferentes interesados, dentro y fuera del país, según investigadores que han seguido sus pasos. También trabó una estrecha relación con Fernando Villavicencio y con el periodista Anderson Boscán, para quienes se volvió una fuente poderosa.
En el expediente del caso Metástasis constan al menos seis chats entre Norero y Jordán que apuntan a Massuh, a quien ambos tenían entre ceja y ceja y buscaban asesinar. Otro personaje que es nombrado recurrentemente como un aliado de Jordán y Norero es el exlegislador del correísmo Ronny Aleaga.
Aleaga era un viejo conocido de Norero. En su adolescencia ambos pertenecían a pandillas rivales. Aleaga era miembro de los Latin Kings y Norero de los Ñetas. Las dos organizaciones delictivas participaron desde 2009 en un proceso de pacificación en el gobierno de Rafael Correa. Aleaga decidió entrar en la política y se integró a las filas de Alianza País, hasta llegar a la Asamblea, primero como suplente y luego principalizado, tras la destitución de Sofía Espín. Norero, mientras tanto, siguió encumbrándose silenciosamente en el mundo criminal, siempre a la sombra de su militancia en el correísmo. Miles de pandilleros como él se incorporaron a la base política del naciente movimiento, según se desprende de las conversaciones halladas en el celular de Norero.
La foto de la piscina -publicada por Villavicencio- en la casa de Jordán en Miami era también un dolor de cabeza para Aleaga, pues fue señalado por aparecer ahí junto a Jordán y otros personajes polémicos como Leonardo Cortázar. Aunque Aleaga se justificó diciendo que fue a una reunión con la familia de su novia en Miami, las sospechas jamás desaparecieron. Y los chats finalmente dan más pistas sólidas sobre la relación cercana entre Aleaga, Jordán y Norero.
“Si cae Lasso, el Ruso vuelve a resurgir”
En junio del 2022, cuando el paro indígena se complicó en el país, Norero y Jordán veían la oportunidad de tumbar al gobierno, en la misma línea del correísmo, en medio del paro de la Conaie. Estaban obsesionados con “volver al poder”. Si cae Lasso, “el Ruso vuelve a resurgir. También le han dado como cachito en fiesta”, según las conversaciones.
Los planes, sin embargo, se diluyeron pronto. Lasso se tambaleó, acorralado por el acoso del correísmo y la Conaie, pero se mantuvo en el poder, por lo cual debieron revisar sus acciones para «volver al poder». Por eso, meses después seguían preocupados de lo que decía la prensa.
Jordán decía que estaba harto de lo que él llamaba un invento: la relación entre él y Norero, con apoyo político del Ruso. Aunque lo negaban públicamente, en los chats dejaron evidencias de que tenían una amistad cercana y que habrían planificado actos criminales, según la Fiscalía.
Los tres también tenían a Villavicencio en la mira, no solo para desacreditarlo. Aleaga se encargó de que fuera sancionado en la Asamblea por haber bautizado a los personajes de la famosa foto de la piscina como “la banda de los tetones”. Su compañera de bancada, Patricia Núñez, también presentó una queja en contra de Villavicencio, quien en ese entonces era legislador. Aleaga lo denunció ante la Fiscalía por violación a la intimidad, calumnias y delito de odio.
El Turco cae en desgracia
El Turco, en cambio, era un antiguo aliado que repentinamente se volvió un enemigo común. Solo entre el 13 y el 28 de junio lo mencionaron, al menos, en 13 ocasiones. En uno de los mensajes quedó registrado que Jordán es quien le dio el contacto del periodista Andersson Boscán, de La Posta, a Norero.
Pero Jordán le advertía: “No confíes mucho en ese man, que me dijo que le hicieron dos atentados. Y es íntimo del Turco, pilas”. Norero consideraba a Boscán un amigo y se lo dijo en otro momento a Jordán. Incluso lo defendía: –“Estuve viendo la página del man y ni tú ni yo salimos ahí”.
-“Pero es que esos manes trabajan juntos, Massuh, Villa, Boscán. Pilas con lo que hablas”, le alertaba Jordán.
Jordán estaba seguro de que todo lo que Villavicencio publicaba sobre él, era porque “era socio de extorsión del Turco; entonces me da con todo”. Ambos conversaban por su cuenta con Boscán. El 18 de junio Jordán le contó: “Anda que llora Boscán, el man es sapo del Turco, pilas (…). A ese hp del Turco están que lo desarman por redes y llama a Boscán a interceder. Le dije yo no soy. ¿Cuántos enemigos tiene ese hp? Pero se sacó la máscara el man”.
Ese mismo día, ambos planeaban matar al Turco. Norero escribió: “Ya lo tengo a tu pana Massuh. Mordió la carnada, ya verás, creo que llega hoy o mañana a gye”. En el mensaje le pasó capturas con un número de teléfono y le dijo: “Este número carga, no hagas bomba, que después me piteas a la pinta. Mañana tiene reunión con esta pinta, ella me pasa la ubicación y ahí comienza la fiesta. Esa lacra es un peligro, pero por un c*** se regala”.
Según Norero, el anzuelo era una mujer con la que «El Turco» estuvo relacionado, que andaba “en todos los reinados” y que incluso ese año fue candidata a Miss Ecuador.
Lo tenían en la mira porque creían que El Turco era quien filtró la información por la que ambos eran “coche bomba” en ese momento (estaban en el ojo de la tormenta). Se sentían traicionados y lo dejaron claro en sus chats.
Norero le decía a Jordán: “Son unas lacras, les abriste la puerta de tu casa”.
-“Los senté en mi mesa”, replica Jordán. Para ambos, Massuh no había medido las consecuencias de divulgar información. “Se creen que van a estar en el poder eternos…. Cuando volvamos tendrán que pedirnos disculpas públicas”.
Massuh tiene 59 años. Es un sagaz empresario guayaquileño, siempre cercano al poder político, con un perfil discreto, desde los primeros años de la Revolución Ciudadana. Su nombre saltó a la vitrina pública en noviembre pasado cuando fue procesado en el caso Encuentro, que investiga una red de corrupción en el sector eléctrico.
Tiene orden de prisión pero está en Estados Unidos, a donde viajó antes de ser vinculado judicialmente por ser una de las supuestas cabezas que manejaba las unidades de negocios del sector eléctrico. Así habría obtenido réditos económicos ilegales para su amigo Clemente Icaza, entonces gerente de empresa pública Cenel, en el gobierno de Guillermo Lasso.
Massuh era una de las muchas fuentes de Fernando Villavicencio. Por eso incluso acudió en varias ocasiones a la Asamblea, a la Comisión de Fiscalización, entonces liderada por Villavicencio, según confirmó Christian Zurita a la prensa.
En abril pasado, El Turco rindió su versión en el caso Encuentro, por vía telemática en la Fiscalía, meses antes de que se ordenara su prisión. Descartó tener relación alguna con el proceso de supuesta delincuencia organizada, cuya cabeza visible sería Danilo Carrera, cuñado del exmandatario Guillermo Lasso.
En su versión, Massuh dijo ser comerciante, pero es bien conocido como un poderoso e influyente empresario con contactos claves en diferentes gobiernos, sobre todo para acceder a información sensible. Ahí radicaba su mayor poder y fue un imán para convertirse en «garganta profunda» para Anderson Boscán y Fernando Villavicencio. Esa relación, según relató Massuh, era de mucha confianza, pero sin compromisos comerciales.
Conoció a Boscán hace cinco años, porque seguía sus programas en la Posta y se volvió un “fan” de Villavicencio por sus denuncias contra la corrupción, mucho antes.
Boletos Quito-Miami-Quito para Boscán y su esposa
Ante la fiscal María Lluglla Massuh descartó haber tenido una relación comercial con ellos. Sin embargo, ante las preguntas de la fiscal a cargo del caso reconoció que a Boscán y su esposa Mónica Velásquez les compró boletos de avión para un viaje que hicieron a Miami, Estados Unidos, hace unos dos años.
-“Usted en algún momento costeó los pasajes aéreos del señor Anderson Boscán y Mónica Velásquez?”, le preguntó la Fiscal.
-“Hace un par de años, no recuerdo muy bien, estaban con la intención de viajar a Estados Unidos, no conseguían el cupo, los ayudé con el cupo y me lo facturaron a mi, yo viajo frecuentemente, y luego ellos me devolvieron el pago”, respondió Massuh.
Al ser consultado por Código Vidrio, Boscán confirmó el préstamo. “Efectivamente. El señor Massuh ha tenido siempre buenas relaciones con aerolíneas. Por lo que algún día, ante la urgencia y falta de cupo, le pedí que consiguiera un par para mí. Y ofrecí pagarlo mensualmente hasta completar el monto”.
Y sobre la cantidad explicó: “No tengo a la mano el valor final y no sé qué es lo que considera “monto alto”, pero debió rondar entre 900 y 1.800 (dólares) el total de la factura, que es el precio promedio de un vuelo UIO-MÍA-UIO”.
La Fiscal también le preguntó a Massuh sobre el envío a su casillero de los estados financieros de una cuenta de Boscán y su esposa en el Wells Fargo Bank de Miami. “No los he recibido. En una ocasión, tal vez un par de años atrás, me solicitaron, el señor Boscán y la señora Velásquez, si podía ayudarles con un casillero para recibir sus estados de cuenta, les referí un casillero de mi propiedad (en Miami)”.
Boscán confirmó la versión de Massuh. “Me lo presentó Fernando Villavicencio como alguien en quien podíamos confiar. Recurrimos al casillero postal de la urbanización de Massuh porque no conocemos a muchas personas en Miami para solicitarles lo propio. La cuenta, por cierto, tiene 500 dólares americanos desde su activación. Y la solicité para activar planes celulares que al final nunca pude comprar. Porque me pedían residir en algún estado americano”.
Massuh mantenía con el periodista de La Posta conversaciones variadas, especialmente sobre temas culinarios y religiosos. “Practico la religión Yoruba (Santería); la practicamos personas, sobre todo, con serios problemas de salud y por eso mantengo conversaciones de índole espiritual religioso con varias personas, entre esas el señor Boscán”. Para el periodista esos temas de conversación eran los mismos que trataría con cualquier persona.
Sobre Villavicencio, el Turco relató que lo conoció hace muchos años en una reunión con otros periodistas.
-“Usted en algún momento costeó los pasajes aéreos del señor Fernando Villavicencio?”, interpeló la Fiscal.
-“No recuerdo con exactitud. pero de serlo seria un vuelo Quito-Guayaquil o Guayaquil-Quito, un día que no había cupo y necesitaba volar; de igual forma el asambleísta Villavicencio me devolvió el dinero del pago en efectivo”, dijo Massuh, quien aseguró que no había vuelto a conversar con Villavicencio desde cuando llegó a la Asamblea.
En medio del vértigo político del 2022, que tuvo su clímax con la Muerte Cruzada decidida por el presidente Lasso para adelantar las elecciones y evitar su posible destitución en la Asamblea, la amistad entre Villavicencio y Boscán terminó en medio de denuncias mutuas de jugos de intereses.
El acceso a informes del CIES
Según documentos clasificados, Massuh fue en su momento un hombre de confianza del correísmo. Fue quien ayudó a que el informático de su confianza Pedro ingresara al Centro de Inteligencia Estratégica (CIES), donde ocupó los cargos de Asesor; Director de Seguridad de la Información; Subdirector General y, posteriormente Subdirector Técnico Estratégico de Tecnologías hasta 2021.
Antes del ingreso de Pedro al CIES, Massuh se habría encargado de promocionar el software ZQLINK desarrollado por un ecuatoriano y el argentino Alejandro R. Luego el software habría sido vendido al CIES por Massuh, por un monto aproximado de 3 millones de dólares. ZQLINK contenía información desactualizada de las bases de datos de distintas entidades del Estado como IESS, ANT, Registro Civil, CNT, entre otros.
Massauh tiene una relación muy estrecha con altos oficiales y exoficiales de la Policía y con funcionarios cercanos al expresidente Guillermo Lasso. Se sospecha que manejaba información del CIES cuando les vendió el software ZQLINK. Habría accedido a esa información en vista de que administraba directamente el sistema y asignaba las claves de IP a los agentes del CIES. Ese contrato se le entregó a Massuh con aparente sobreprecio, lo que es investigado por la Fiscalía por pedido de las autoridades de esa entidad, desde 2021.
Massuh, además habría estado involucrado en la filtración de los audios que salieron a la luz pública y que circularon en las redes sociales de la conversación entre José Serrano y Carlos Pólit, excontralor prófugo de la justicia, sentenciado por corrupción en el caso Odebrecht. En los audios se evidenció que Serrano y Pólit querían sacar del cargo al entonces fiscal general Carlos Baca.
Según varias fuentes de Inteligencia, hay serias sospechas de su participación en irregularidades y corrupción desde el régimen de Guillermo Lasso en el Servicio Nacional de Aduanas, conjuntamente con otros funcionarios que incluso serían parte del actual gobierno.
“Eres mi alma gemela”
Jordán y Norero no solo hablaban de negocios, legalizaciones de venta de propiedades, audiencias y planes para atacar a sus enemigos. También descargaban sus angustias y frustraciones. Era usual que se saludaran o se despidieran enviándose bendiciones. En varias ocasiones, Jordán se quejaba de fuertes dolores de cabeza, especialmente cuando en los medios de comunicación y en redes se desataba una nueva historia o foto sobre él y sufría por tener que darle explicaciones a su familia. Había tal cercanía que, Norero le dijo a Jordán un par de ocasiones: “Es que eres mi alma gemela”.
Durante el paro de junio de 2022, no se perdían detalles de lo que pasaba en las calles. Cuando las manifestaciones fueron más violentas, ellos celebraban. “Que se vayan todos esos hp.”, decía Jordán.
Y Norero respondía. “Jajaja, ahora falta que diga que somos los causantes”.
– “Es que eso van a decir, por qué crees que te jodo que borres todo. Nosotros somos los culpables de todo. Dan el c*** por un vínculo”, escribía Jordán.
En sus redes sociales, el entonces legislador Villavicencio subió una foto en la que Jordán aparecía junto a su esposa y sus sobrinas. El tuit decía: “Una de las investigaciones abiertas señala que desde esta piscina de Miami se estaría financiando la convulsión social y política de Ecuador”.
Ellos se burlaban. “Ese hp anda enamorado. Eres el financista del paro, ni saben que andamos hasta las mismas”, decía Jordán. Se refería a que el 17 de junio Norero estaba desesperado por conseguir 250.000 dólares pero él no podía ayudarlo. Jordán tenía dinero en Miami, pero en Ecuador le habían robado. Solo consiguió 100 000. Desde EE.UU. El encargado de entregarle ese monto al patrón fue el Joyero.
Jordán hizo sus esfuerzos. “Me avisas, que así sea vendo mis relojes, ñaño. Yo lo apoyo”. Y aparentemente cumplió.“Vendo 3 Rolex de 50 mil cada uno, 150 mil hay. Dime a quien le entrego, confirme ñaño”. Norero respondió: “Al Joyero, ñaño, para que le pase al abogado”.
Norero se esmeraba en seguir derrochando dólares para cubrirse las espaldas y salir libre. Jordán le aconsejaba: “Estructura bien nada más y para delante, que si tú estás bien, yo también”. Norero estaba seguro de que lo lograría, porque lo único que no tenía cómo justificar luego de su captura y del allanamiento a su casa en Samborondón eran 50 000 euros en billetes de 500. El 23 de junio, Norero le dijo: “Mira lo que me prestaste me sirvió para cambiar el delito del arma, asegurar los j (jueces) y esperar la audiencia”.
Fuente: Código Vidrio
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