Batalla de Tarqui
Un conflicto armado, que ha sido escrito por varios historiadores y con diferentes visiones de acuerdo con la época, sin embargo, esta batalla ahora queda para los registros históricos a sabiendas de los cambios geopolíticos en el continente y el mundo.
Ecuador y Perú, son dos países hermanos sudamericanos llamados los “tercermundistas” que tienen mucho de historia en común, que se necesitan y complementan y que no deben ser subestimados por superpotencias que nos quieren seguir dominando. Un conflicto que debe quedar atrás en función de la integración latinoamericana.
La historia dice que: el 27 de febrero de 1829 fue el inició de varias confrontaciones. Las grancolombianas lograron una victoria “táctica” al impedir el avance de los adversarios que conllevó a la firma del armisticio en la “Casa de los Tratados” en Girón que definían el cese de hostilidades, sin embargo, que las fuerzas peruanas seguían dominando sobre todo el mar junto a Guayaquil y por ende la ciudad. Recién el 20 de julio del mismo año (1829), el líder peruano Agustín Gamarra luego de derrocar a La Mar entrega a Guayaquil. Se disuelve la Gran Colombia y en 1931 se da paso al nacimiento de las naciones de: Nueva Granada, Ecuador y Venezuela. Continuaron los conflictos hasta que se resolvió definitivamente el 26 de octubre de 1998 con la firma de acuerdo de paz entre Ecuador y Perú en Brasilia con las firmas de los presidentes Jamil Mahuad y Alberto Fujimori.
Esta firma de la paz debió y debe servir para la integración de 2 naciones vecinas, con problemas y objetivos comunes. Los conflictos ya alimentaron la historia. Hoy debe haber una cooperación mutua para luchar contra el crimen organizado, la narco delincuencia, la corrupción y más males que afectan a pueblos pobres que deben vivir en el presente, sumando acciones en función de objetivos comunes para salir del subdesarrollo en el cual nos encontramos.