Consulta popular: Daniel Noboa y sus opositores no salieron con las manos vacías, pero tampoco consiguieron todo lo que se proponían
En primeros resultados el Sí se impuso en 9 preguntas y el No venció en 2. Según analistas, los comicios no dejaron ganadores o perdedores absolutos.
Los primeros resultados de la consulta popular y referéndum muestran que el Sí gana en las nueve preguntas de seguridad, mientras que el No vence en las dos preguntas sobre arbitraje internacional y contrato de trabajo por horas, de acuerdo al conteo rápido del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según esto, la población dejó claro que su prioridad es que hayan soluciones urgentes a la inseguridad. Y que no está de acuerdo a que el Estado sea demando por empresas extranjeras en tribunales internacionales, ni que se implemente la contratación por horas.
Para el presidente Daniel Noboa y sus coidearios se trata de un “triunfo”, una “goleada” 9-2, que da al Ejecutivo un fuerte “espaldarazo” para impulsar reformas legales en materia de seguridad, que deberán ser aprobadas por la Asamblea Nacional.
Los opositores sostienen que el régimen “ha sido derrotado” en las urnas, porque el No se impuso en las preguntas D (arbitraje) y E (contrato por horas), consideradas la medula de la consulta popular, demostrando que la mayoría de gente se opone a que la soberanía del país y los derechos de los trabajadores sean afectados.
Los resultados del conteo rápido son los siguientes:
- Pregunta A: Sí 73,05 % – No 26,95 %
- Pregunta B: Sí 65,11 % – No 34,89 %
- Pregunta C: Sí 60,49 % – No 39,51 %
- Pregunta D: Sí 35,12 % – No 64,88 %
- Pregunta E: Sí 37,17 – No 68,83 %
- Pregunta F: Sí 70,72 % – No 29,28 %
- Pregunta G: Sí 68,23 % – No 31,37 %
- Pregunta H: Sí 67,69 % – No 32,31 %
- Pregunta I: Sí 64,66 % – No 35,34 %
Tres analistas consultados por este Diario opinaron que no se puede hablar de manera definitiva de ganadores y perdedores absolutos. El oficialismo y sus detractores no salieron con las manos vacías, pero tampoco consiguieron todo lo que se proponían.
La imagen y credibilidad del presiente Daniel Noboa y de su equipo pudieron haberse debilitado la última semana por la frustración de los ciudadanos ante los cortes de luz y las contradicciones de las autoridades al respecto. Asimismo, por las erráticas declaraciones en cuanto a la remuneración y prestaciones del contrato por horas.
Y por la campaña por el No, que no estuvo promocionada exclusivamente por organizaciones o actores políticos tradiciones, sino también por ciudadanos que no pertenecen o militan con una tienda política.
Los primeros resultados de la consulta popular y referéndum muestran que el Sí gana en las nueve preguntas de seguridad, mientras que el No vence en las dos preguntas sobre arbitraje internacional y contrato de trabajo por horas, de acuerdo al conteo rápido del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según esto, la población dejó claro que su prioridad es que hayan soluciones urgentes a la inseguridad. Y que no está de acuerdo a que el Estado sea demando por empresas extranjeras en tribunales internacionales, ni que se implemente la contratación por horas.
Para el presidente Daniel Noboa y sus coidearios se trata de un “triunfo”, una “goleada” 9-2, que da al Ejecutivo un fuerte “espaldarazo” para impulsar reformas legales en materia de seguridad, que deberán ser aprobadas por la Asamblea Nacional.
Los opositores sostienen que el régimen “ha sido derrotado” en las urnas, porque el No se impuso en las preguntas D (arbitraje) y E (contrato por horas), consideradas la medula de la consulta popular, demostrando que la mayoría de gente se opone a que la soberanía del país y los derechos de los trabajadores sean afectados.
Los resultados del conteo rápido son los siguientes:
- Pregunta A: Sí 73,05 % – No 26,95 %
- Pregunta B: Sí 65,11 % – No 34,89 %
- Pregunta C: Sí 60,49 % – No 39,51 %
- Pregunta D: Sí 35,12 % – No 64,88 %
- Pregunta E: Sí 37,17 – No 68,83 %
- Pregunta F: Sí 70,72 % – No 29,28 %
- Pregunta G: Sí 68,23 % – No 31,37 %
- Pregunta H: Sí 67,69 % – No 32,31 %
- Pregunta I: Sí 64,66 % – No 35,34 %
Tres analistas consultados por este Diario opinaron que no se puede hablar de manera definitiva de ganadores y perdedores absolutos. El oficialismo y sus detractores no salieron con las manos vacías, pero tampoco consiguieron todo lo que se proponían.
La imagen y credibilidad del presiente Daniel Noboa y de su equipo pudieron haberse debilitado la última semana por la frustración de los ciudadanos ante los cortes de luz y las contradicciones de las autoridades al respecto. Asimismo, por las erráticas declaraciones en cuanto a la remuneración y prestaciones del contrato por horas.
Y por la campaña por el No, que no estuvo promocionada exclusivamente por organizaciones o actores políticos tradiciones, sino también por ciudadanos que no pertenecen o militan con una tienda política.
Los resultados dejan lecciones que ya entran en juego en la escena política y serán decisivas en los próximos meses, ya que las elecciones presidenciales de 2025 están a la “vuelta de la esquina” y las personas esperan soluciones inmediatas ante a la inclemente inseguridad, la aguda falta de empleo y la crisis energética.
El Ejecutivo buscará distanciarse de las preguntas que no eran de seguridad
Caroline Ávila Nieto, académica investigadora en comunicación política, opinó que “las derrotas son huérfanas y las victorias tienen todo tipo de padres”. Por ello, el Ejecutivo buscará alejarse de las dos preguntas que no eran sobre seguridad.
“Es evidente que el haber armado una imagen muy anclada en la imagen gubernamental tiene que desmarcarse de estas dos (preguntas) que estaban fuera del panorama de seguridad. Lo interesante de esto es saber si la población va a recibirlo así, si es que el discurso político va a aceptarse así”, comentó.
Que en las preguntas D y E el No haya sacado más del 60 % merece una lectura distinta por parte de las autoridades. Además, Ávila destacó que la campaña por el No en estas interrogantes tuvo como protagonistas a la Conaie, que se opuso a la consulta popular desde el inicio, pero no se puede interpretar como su éxito exclusivo, porque intervinieron otras organizaciones y ciudadanos.
“Lo que va a tener que hacer el Gobierno para recuperar la aprobación y confianza es resolver la crisis energética, que es lo urgente. Como le son favorables las preguntas de seguridad, en este momento el Ejecutivo tiene las herramientas para demostrarle a la población que tiene que darle tranquilidad”, señaló.
Ese distanciamiento del que habló Ávila Nieto, respecto del contrato por horas, ya se vio la víspera de las votaciones. La tarde del sábado, la bancada oficialista Acción Democrática Nacional (ADN) publicó un comunicado en el que confrontó al movimiento Construye y le atribuyó la autoría de la pregunta E. Según ADN, el contrato por horas fue una propuesta de la lista 25 y el presidente Daniel Noboa la acogió “al ser un gobernante democrático”.
Al presidente de la República no le sirve una victoria parcial en la consulta
Giussepe Cabrera, analista político, señaló que, de confirmarse los resultados preliminares, “sería la primera consulta popular, desde el retorno a la democracia, que no se constituye como un apoyo o un rechazo al presidente de la República, sino también como una discusión sobre causas, conceptos, sobre las cuales había claras contraposiciones entorno al trabajo por horas y el arbitraje internacional”.
La segunda cuestión, anotó Cabrera, es que la consulta dejaría en un resultado “de suma cero” a las intenciones del presidente de buscar la reelección en 2025, ya que a Noboa no le sirve la victoria parcial del plebiscito y referéndum, sino un triunfo absoluto. Haber incluido esas dos preguntas sensibles -que termina perdiendo- minó en algo su aceptación entre la población, le restó cierta legitimidad y abrió la puerta a que sus opositores en la Asamblea se planten con firmeza al ver que la aprobación del presidente ha mermado.
Respecto a la campaña por el No, el analista comentó que quien ganó aliento entre las figuras políticas fue Leonidas Iza, líder de la Conaie, cuya imagen se había desgastado con el tema de los subsidios a los combustibles. No obstante, eso no implica que ha sido el vencedor, sino que “le da posibilidades de ser una oposición reaccionaria, como fue al final del mandato de Guillermo Lasso”.
El correísmo, en cambio, recién se sumó a la campaña por el No luego de la detención del exvicepresidente Jorge Glas, en la Embajada de México en Quito. “Se pusieron en contra del Gobierno porque capturaron a uno de los suyos, nada más”, anotó.
Cabrera agregó que habrá que ver lo que pase en la Asamblea Nacional cuando el Ejecutivo presente el proyecto de ley con las reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP), para hacer las modificaciones que se aprobaron en la consulta popular y estas entren en debate. Deberá medirse y buscar consensos con las bancadas que antes -de una u otra forma- le dieron el voto para aprobar las leyes económicas y que ahora son sus rivales legislativos.
El mayor reto será cumplir con las expectativas de los votantes
Jorge Tapia, politólogo y máster en Políticas Públicas, observó que Noboa no está caído. El respaldo a las nueve preguntas de seguridad “apalanca su popularidad” y, seguramente, esperará capitalizar estos resultados con una victoria aún más amplia en los comicios de 2025.
“Se puede hablar de una victoria, sí. Principalmente desde lo político, no desde lo electoral, porque esto (los resultados preliminares de la consulta) está dando un voto de confianza a Daniel Noboa”, refirió.
El mayor reto que tiene por delante Noboa será cumplir con las expectativas de la gente que lo apoyó. No se trata únicamente de influir en la percepción ciudadana desde lo comunicacional, sino demostrar, con cifras comparables e información transparente, que la situación del país está mejorando, puntualizó Tapia.
“El problema con esto es que no son medidas inmediatas y el ciudadano quiere los resultados (soluciones) mañana, porque se le ha dado un voto de confianza al presidente. Si no se ven las señales, si no se ven mejoras, lo que va a pasar es que realmente la popularidad del presidente va a caer. Sin embargo, con ese voto de confianza, Daniel Noboa ya no va a depender tanto de los estados de excepción para que puedan salir los militares a las calles y que el ciudadano siga teniendo una percepción de seguridad más alta”, anotó el experto.
De acuerdo con los plazos establecidos en las preguntas de la consulta, una vez que se publiquen los resultados oficiales del plebiscito, el presidente de la República tendrá un plazo máximo de cinco días para entregar a la Asamblea Nacional el proyecto de ley con las reformas al COIP. Luego, el Parlamento tendrá asta 60 días para debatir y aprobar la reforma legal. (I)
Fuente: El Universo