En marzo pasado se dio un hecho similar en Cuenca, capital azuaya.
Este domingo fue hallado sin vida un hombre que aparentemente estaba vinculado al delito de extorsión, también como conocido como cobro de vacunas.
La Policía halló el cadáver abandonado y con dos letreros en los que se expusieron las razones de su muerte. En marzo pasado se dio un hecho similar en Cuenca, capital azuaya.
La víctima aún no fue identificada por las autoridades, pero el jefe provincial de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro de la Policía Nacional (Dinased), Pablo Inga, comentó algunos detalles del suceso.
Entre ellos, que estaba al borde de la carretera, maniatado, golpeado y con dos letreros pegados al pecho y piernas en los que se hacía alusión a la no presencia de vacunadores.
Los vecinos de la parroquia Nulti, localizada en el norte de Cuenca, dijeron al uniformado que no lo conocían. El único dato que dieron fue que tendría unos 25 años.
Por las huellas encontradas en la escena del crimen, Inga estima que la muerte violenta ocurrió unas seis u ocho horas antes de haberlo hallado, esto es, durante la madrugada del domingo.
Y por su condición de anónimo fue llevado al centro forense de Cuenca para practicarle la autopsia de ley. Se espera que algún familiar acuda a identificarlo.
En lo que va del 2023, este es el segundo crimen de estas características que se descubre en la ciudad, pues el 31 de marzo pasado, dos hombres fueron hallados en una situación similar, pero en la vía a Ucubamba, en un camino de tercer orden.
En esa jornada los dos muertos también tenían golpes y letreros en los cuerpos contra ese delito.
Un detalle para tomar en cuenta es que ambos lugares, tanto el del crimen de marzo como el de este domingo, quedan cerca, apenas a 6 kilómetros de distancia entre ambos.
Fuente: El Universo
