Cada vez hay menos ecuatorianos que deciden casarse y se reporta un aumento de los divorcios. Son una parte de los datos más impactantes que arrojó el Censo de Población y Vivienda, efectuado el año pasado, y cuyos resultados se conocieron este jueves.

Roberto Castillo, director ejecutivo del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), explicó en entrevista con Vistazo que entre 1997 y el 2022 los matrimonios han caído un 17% y el número de divorcios aumentó en un 187%.

Esto ocurre por varios factores. Por ejemplo, la edad promedio de las mujeres para casarse es de 32 años. Hace 20 años, la edad promedio era de 24 años.

El hecho de que los ecuatorianos ya no quieran casarse o lo hagan más tarde ha provocado que el número de hijos sea menor porque la edad fértil es de 15 a 49 años.

El INEC había proyectado 4.3 millones de personas que iban a nacer en estos 12 últimos años, pero 400 mil personas (casi medio millón) no nacieron.

“Estamos viendo un comportamiento en el que te casas más tarde o no te casas. Tienes menos números de hijos. Ahora las parejas más jóvenes optamos por tener 1 o 2 hijos y si no quieres, adoptas una mascota”, mencionó Castillo.

TAMAÑOS DEL HOGAR

La falta de casamientos y la reducción de la fecundidad también se evidencia en el tamaño de los hogares. En el año 2000, las casas estaban integradas por 4.2 personas, pero ahora son 3.2 personas.

De hecho, hay un incremento de hogares unipersonales. En el 2001 eran 9.1%, hoy son 16.7%. Mientras que los hogares de cinco integrantes o más, hace 20 años representaban el 39.2%, en el 2022 se redujeron a 20.7%.

Tenemos más personas viviendo solas y los tamaños del hogar han caído. Hay una reconfiguración del hogar”, señaló el director ejecutivo del INEC.

OTROS FACTORES

El director ejecutivo del INEC también resalta que los años de escolaridad de las mujeres aumentó a mayor ritmo que el de los hombres, lo que evidencia que las brechas en temas educativos se están reduciendo. Lo mismo ocurre en la participación laboral.

“Esta es la historia de mujeres en general y no solo tiene que ver con las clases medias y medias-altas”, acotó Castillo.

Otro ejemplo es que el uso de anticonceptivos aumentó en mujeres, de acuerdo a datos de encuestas históricas del INEC. En 1999, el 65.8% de las mujeres utilizaban estos métodos para no quedar embarazadas y en el 2018 la cifra creció a 92.8%.

“Ya no es un tema de estratos. Antes eran métodos más invasivos y ahora hay métodos más fáciles de utilizar. Es decir, que independientemente del estatus socioeconómico, tienes más acceso a este tipo de información y también de compra o adquisición de estos elementos”.

Fuente: Vistazo

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