Desempleo y reducción en la recaudación del IVA evidencian recesión

Un estudio elaborado por la CCC plantea que es necesario que el gobierno cambie de estrategia.

Fuente: INEC

César Barros, de 57 años de edad, ayer caminó toda la avenida Don Bosco llevando tres espejos bajo sus brazos, solo ayudado de pequeños pedazos de papel periódico para no lastimarse las manos. Eran espejos tamaño grande, para decorar habitaciones, cada uno a 32 dólares, el precio final depende del regateo (debate con el comprador).

Este padre de familia ya no ha intentado otra vez presentar una carpeta en alguna institución pública o privada para conseguir trabajo, pues no le ha resultado. La última vez solicitó que lo contraten como guardia de seguridad, y le negaron bajo el argumento de que su edad no es la apropiada para este oficio.

Obligado, entonces, buscó otras alternativas laborales, tal como sucedió cuando tenía nueve años de edad, que por las circunstancias económicas se vio obligado a trabajar como cobrador de bus; después como cargador de hierro, etcétera.

No le teme al trabajo duro, tampoco se queja porque no consigue el empleo que él quisiera, mas bien les dice a los jóvenes desempleados que no se desesperen y que, mientras tanto, busquen otras opciones “más que sea reciclando botellas y cartones se pueden ganar la vida honradamente”.

Cifras

El presidente de la Cámara de Comercio de Cuenca (CCC), Xavier Patiño, confirma que el desempleo en el Ecuador pasó de 4,8% en diciembre de 2015 a 5,3% a junio de 2016, lo que significa aproximadamente 60 mil personas que se quedaron sin empleo y cerca de 220 mil personas pasaron a formar parte del subempleo en este mismo período.

En Cuenca, en base a datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), Patiño recuerda que a junio de 2015 el desempleo se ubicó en 3,1% y en junio de 2016 subió al 3,3%.

Según el estudio que hizo la CCC el tema desempleo no es un hecho aislado en la coyuntura económica nacional. El desempleo, junto a otros dos indicadores son fundamentales porque “evidencian la recesión en la que nos encontramos en el país al llegar a la mitad del año 2016”.

Los otros dos factores son: el decrecimiento interanaul de -3% del Producto Interno Bruto (PIB) para el primer trimestre de este año, así como los dos últimos trimestres de 2015 de -1% y -1,5%, respectivamente.

Y el Impuesto al Valor Agregado (IVA) refleja una reducción en la recaudación en -14% a junio de 2016 en comparación a igual periodo del año anterior.

“Estos indicadores evidencian lo que individualmente muchos negocios están atravesando: disminución del consumo, disminución en ventas, menores ingresos, acumulación de inventarios, necesidad de reducir costos, falta de liquidez y, lo más grave, la pérdida de empleos y la imposibilidad de cumplir con sus obligaciones”. (ACR)-(I)

Registros en la Red Socio Empleo

¿Concretamente cuántas personas desempleadas existen en Cuenca? en la dirección regional del Ministerio de Trabajo del austro no se entregó esta cifra, se dijo que la institución que maneja esa información es el INEC.

En una entrevista el domingo anterior el director de trabajo, Warner Martínez, recordó que en Cuenca están habilitadas dos oficinas de la Red Socio Empleo para que se registren quienes no tienen trabajo, en la espera de conseguir uno. Una oficina está en el SECAP, del Parque Industrial; y, la otra en la Intendencia de Policía, calle Benigno Malo.

El director ejecutivo de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca (CIPEM), Andrés Robalino, revela que de enero a marzo de 2016 “se han perdido aproximadamente 4.000 empleos, lo que significan 4.000 familias, es mucha cantidad de gente”.

Aunque, en comparación con lo que sucede en Quito y Guayaquil, esta cifra de Cuenca no es tan alta, Robalino dice que este dato tiene mucha relación con un sector productivo que no depende tanto del petróleo, y que genera el 95% de empleos en el Azuay y que, aunque se ha visto afectado, continúa produciendo.

Xavier Patiño, presidente de la CCC, advierte que el problema es del país y, por ello, la complementariedad de los esfuerzos del sector público y privado es y debe ser la mejor receta para encaminarse a superar esta compleja situación.

Sin embargo, lamenta “a pesar de las distintas propuestas planteadas en múltiples instancias por parte del sector productivo, no ha existido la concordancia necesaria con el gobierno; claramente se evidencia un problema de distintas visiones sobre cómo promover el desarrollo del país”.

Criterio del Ministro

Este medio de comunicación ayer intentó entrevistar al Ministro de Trabajo, Leonardo Berrezueta, sobre el tema del desempleo, pero su personal de Comunicación explicó que no es posible, pues primero se debe agendar, lo que implica anticipación.

En una conferencia sobre reformas laborales, que se realizó ante empresarios, el secretario de Estado, se pronunció sobre asuntos laborales, y sus declaraciones las publicó diario El Universo en su edición del 29 de junio de 2016:

El Ministro expuso otras estadísticas; por ejemplo, que a causa del terremoto de abril en Manabí y Esmeraldas se perdieron aproximadamente 20 mil plazas de trabajo. “Esto va a trastocar la tasa de desempleo este año”, reconoció el ministro del Trabajo, quien a la vez indicó que en marzo el desempleo ya había aumentado un punto porcentual.

Pese a esto, señaló que las reformas laborales, cuyo reglamento ya fue aprobado por esa cartera de Estado, son dirigidas a aliviar la situación, tales como el trabajo juvenil, las jornadas reducida y prolongada, y además la licencia opcional sin remuneración por maternidad. Dicho reglamento entraría en vigencia a partir del 1 de julio próximo, aseguró Berrezueta.

El funcionario indicó que solo espera la aprobación del Ministerio de Finanzas sobre el desembolso del aporte del Estado para cubrir el porcentaje patronal de la seguridad social para el primer empleo de personas de 18 a 26 años de edad y el seguro de desempleo para las personas desempleadas, con carácter de retroactivo, desde enero pasado.

Sobre las pasantías, el ministro calculó que se beneficiarán cerca de 13.367 estudiantes universitarios que cursan los dos últimos años de carrera. Esto, de un total de 55 mil jóvenes en igual situación que no tienen actividad económica. Recordó que las pasantías no son pagadas y los patronos solo cancelarán un tercio del salario básico ($ 122). Sin embargo, el patrono está obligado a afiliar al pasante al Seguro sobre el salario básico ($ 366). Y 12 empresas han pedido reducir sus jornadas, según el Ministerio. (REM)-(I)

Fuente: El Mercurio

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