Malestar existe en los usuarios y comerciantes del Control Sur, debido a las incomodidades que viven a diario por la falta de una parada de buses adecuada, considerando que al lugar llegan unidades de servicio tanto urbano, parroquial, cantonal y provincial. Esta parada se ubica a pocos metros de la intersección de la Panamericana Sur y la calle Villalobos.Se puede observar como desde las primeras horas de la mañana, gran cantidad de personas llegan a la parada para tomar los diferentes buses que los trasladen a los cantones: Girón, San Fernando, Santa Isabel, Pucará, Nabón y Oña, además de las provincias vecinas de El Oro y Loja.Geovanny Zabala, morador de la parroquia Victoria del Portete, manifestó que uno de los principales problemas es la falta de casetas para protegerse del sol y las lluvias. “Las autoridades deben mejorar este espacio que es muy concurrido”.Por su parte, Rosa Montaleza, miembro de la asociación de comerciantes que laboran en la zona, comentó que por iniciativa del gremio que integran 10 personas, se arrendó un local por 250 dólares, y se trató de acomodarlo para que los usuarios esperen los buses, mientras venden los productos. “Hace un año se dialogó con el Municipio, pidiendo el apoyo para mejorar el espacio, pero quedó en palabras”.Daniel Cárdenas, director municipal de Tránsito, DMT, dijo que se ha dispuesto que los buses que lleguen a la ciudad ingresen por la plataforma de Narancay; en el caso de los que salen “deberían ingresar a la plataforma por la Autopista lo que implicaría atravesar toda la vía. Se tendría que mejorar las condiciones geométricas y un análisis de tránsito para ver si se puede hacer alguna intersección semafórica y evitar complicaciones”. (BPR)-(I)
Fuente: El Mercurio
