Aunque en este momento goza de libertad provisional, el exvicepresidente Jorge Glas busca que se rebajen aún más sus penas por corrupción.

El recurso se planteó el 5 de julio de 2023. Jorge Glas, exvicepresidente del correísmo, apeló al artículo 230 del Código Orgánico de la Función Judicial (COFJ) para pedir una rebaja de pena.

Ese artículo se refiere a las competencias de los jueces de garantías penitenciarias. Una de estas es resolver la situación jurídica de las personas sentenciadas, cuando se haya aprobado una ley posterior más favorable.

Inicialmente, Glas planteó el recurso ante la Unidad Judicial de Guayaquil. Y el sorteo del proceso recayó en el despacho del juez Emilio Lima.

El 12 de julio de 2023, antes de avocar el conocimiento de esa causa, Lima pidió una certificación sobre la existencia de otras garantías penitenciarias a favor de Glas que estén en trámite, su estado y la unidad judicial en la que se llevan.

Según esa certificación, que se emitió al día siguiente, Glas ha presentado otras ocho garantías penitenciarias. Entre las que están los pedidos de unificación de penas, la solicitud de prelibertad y el cómputo de pena total.

Una de estas, que se presentó en mayo de 2023 y con la que Glas busca el cómputo total de la pena que debe cumplir, sigue en trámite en la Unidad de Garantías Penitenciarias de Quito.

Por esta razón, el 25 de julio de 2023, el juez Lima se inhibió de conocer la causa de rebaja de pena. Ya que “la competencia para vigilar y controlar el cumplimiento de las penas de Glas” está en la Unidad Judicial de la capital.

El caso en Quito

La causa que está en trámite en Quito está a cargo de la jueza Soledad Manosalvas. En este caso, la magistrada tiene que decidir cuánto tiempo en la cárcel todavía debe cumplir el exvicepresidente Glas.

Glas tiene dos sentencias en su contra por seis y ocho años de cárcel, por los casos Odebrecht y Sobornos, respectivamente.

Sin embargo, en enero de 2023, la justicia resolvió que la pena mayor absorba a la menor y que Glas deba cumplir únicamente la sentencia de ocho años de prisión.

El 6 de junio de 2023, la magistrada recibió el informe que señala que el tiempo total que Glas estuvo en prisión es de cinco años y 15 días. Por lo que le resta por cumplir dos años y 11 meses.

Antes de resolver el cómputo de la pena por cumplir, Manosalvas dio un plazo para que el Servicio de Atención a Privados de la Libertad (SNAI), la Fiscalía y Glas presenten sus objeciones al cálculo presentado en la audiencia.

Con base en ese cómputo, Glas podrá definir si ya ha cumplido el 60% de su pena y acceder al beneficio de régimen semiabierto, antes conocido como prelibertad.

Hasta el 2 de agosto de 2023 esta decisión aún no se ha tomado. Glas pidió que ese caso sea trasladado a Guayaquil, ya que es en esa ciudad en la que él reside y donde cumple las presentaciones periódicas ordenadas por la justicia. Pero Manosalvas negó ese pedido.

Al momento Glas goza de libertad provisional, ya que Emerson Curipallo, juez de Santo Domingo, le concedió una medida cautelar. Con esa resolución, el exfuncionario estará libre hasta que se resuelva su situación jurídica.

Fuente: Primicias

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