Niños y ahora ancianos son las personas que más usan las ‘mafias’ para promover la mendicidad en Cuenca. Esta organizaciones irregulares incluso generan ‘puestas en escena’ que causan lástima con el fin de generar más recursos.

Dar caridad no es la mejor forma de ayudar a personas en situación de mendicidad. Esto porque solo perenniza la presencia de mafias y organizaciones irregulares que se aprovechan de niños y, ahora, adultos mayores para obtener dinero.

Solo en Cuenca se estima que existe entre 40 y 50 núcleos de personas que se dedican a pedir dinero en las calles del Centro Histórico. Es decir, un promedio de 120 y 150 personas.

Esto, según datos de Cristina Almeida Mocoso, coordinadora de las Juntas Cantonales de Protección de Derechos de Cuenca, para quien es fundamental dejar de entregar dinero para no perpetuar el abuso a, sobremanera, niños, adolescentes y ancianos.

“Si dejamos de regalar plata, incluso alimentos, cortamos de raíz este fenómeno, pero, sobre todo, a las mafias detrás de quienes piden dinero en las calles”, agregó Almeida.

Cuenca se ha convertido en un imán del turismo nacional y extranjero y con esto también crece la mendicidad con ‘puestas en escena’ que provocan lástima.

Gracias a estas ‘escenografías’, un menor de edad reúne, en promedio, entre 40 y 60 dólares diarios producto de la mendicidad. Los montajes incluyen animales, mujeres embarazadas o con bebés en brazos.

Estas acciones “son crueles”. Las personas bajo el dominio de las organizaciones, trabajan entre 10 y 12 horas al día “pasan bajo solo, lluvia, en polvo e incluso les quitan chompas y zapatos para provocar más lástima”.

Aquí se evidencia la grave vulneración de derechos porque los niños, muchas veces no tienen ni documentos, por lo tanto, se desconoce su proveniencia.

Organizaciones

Desde la Fundación Ciudadanos en Acción, trabaja desde hace dos años en la erradicación de la mendicidad.

Este año atendieron a 160 familias, a quienes se atendió con los servicios dentro del departamento de psicología, promoción social y trabajo social, para adultos mayores, niños, niñas, adolescentes y personas con discapacidad.

Todas estas personas explotadas, de acuerdo a Kevin Mora, integrante de este colectivo. Él contó que promueven talleres de sensibilización en instituciones y empresas locales para disminuir la mendicidad.

De acuerdo a sus investigaciones, estiman que la mendicidad es el resultado del abandono de niñas y niños a cargo de sus abuelos o personas adultas mayores. EN este sentido, ha palpado que son estos grupos de adultos los que viven en condiciones precarias, en abandono y pobreza.

Para ellos es fundamental ayudar escolarizar a los niños, llevarlos a citas médicas y buscar mecanismos para crear bancos de alimentos. Un ejemplo de apoyo, son ellos, quienes salieron de las aulas universitarias y ahora son una fundación.

Mendicidad

Desde la Fundación se señaló que la mendicidad debe entenderse desde tres aristas. La mendicidad desde quienes piden comida, de quienes piden dinero y quienes piden comida y dinero.

A quienes aplican en estos tres segmentos son personas que ingresan dentro de las cifras de personas en condición de mendicidad.

No hay estadísticas claras, por lo tanto, se requiere un censo definitivo que ayude a entender la situación actual de esta población.

Además es importante diferenciar la mendicidad permanente de aquella que se da por la presencia de migrantes o por su paso por la ciudad.

Provincias

En diciembre ocurre un hecho particular en Cuenca. Ciudadanos provenientes de la Sierra Norte y Sierra Centro del país llegan exclusivamente para pedir caridad. Ellos promueven lo que se denomina ‘mendicidad programada’, es decir, solo acuden a Cuenca en ciertas fechas para recaudar dinero.

En el centro histórico es en donde aparece la mayor cantidad de personas en condición de mendicidad. Son entre 40 y 50 núcleos de personas que aumentan entre el 20 y 25 % por Navidad. También aparecen en la Terminal Terrestre y centros comerciales.

Ancianos

Los adultos mayores presentan un riesgo más complejo. Son personas con problemas de demencia, parkinson y, por lo tanto, muchos desconocen donde están y que están están haciendo “eso es crueldad máxima”. (I)

Se canalizan las donaciones

A través de la Junta de Protección de Derechos y de Acción Social Municipal se canalizan las donaciones para niños, niñas, adolescentes y adultos mayores. Los que más se requiere es ropa, zapatos, útiles escolares, kits de alimentos, insumos médicos básicos y otros artículos. Estos son centros que canalizan las donaciones para entregarlas a los sectores más necesitados. Esto se pueden hacer en las oficinas de Desarrollo Social en la calle Gran Colombia y Padre Aguirre o en Acción Social, en el Parque La Libertad. Lo único que se pide es que los bienes estén en buen estado. También es posible contactarse al 074150962 para las donaciones. (I)

DATOS

– Desde el MIES se han identificado 660 casos de mendicidad en Azuay, de esta cifra 440 corresponde a trabajo infantil.

– De acuerdo a cifras del MIES, la mendicidad en el país aumentó entre el 30 y el 40 %. Pero se aclara que hay otras lógicas como las olas migratorias.

– Los casos de personas en situación de mendicidad se dan, sobre todo, en los cantones de Cuenca, Nabón y Oña.

Fuente: El Mercurio

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